Vivimos tiempos convulsos y retorcidos en nuestro sector profesional. No son pocos los arquitectos, aparejadores, ingenieros, delineantes que acuden a las aulas deseosos de encontrar en el BIM y el manejo de sus herramientas aquel plus que les distinga del resto de sus compañeros, que les dote de un punto más en la selección de ese puesto de trabajo al que aspiran y por el que –lamentablemente- también suspiran. Ojala no tuviese que ser así.
Y cuando expreso mi deseo de que no sea así no me refiero a que añoro una mejor situación laboral para todos –que también-, sino a que desearía que mis compañeros, tengan la titulación que tengan, acudiesen a las aulas de una universidad o un centro de formación con la mente puesta en el aprendizaje por la virtud, por la excelencia de su trabajo, aunque ahora mismo no lo tengan, conscientes de que solo cuando sean profesionales y no solo por tener un diploma o un título de master, encontraran un trabajo por el que se les valore.
Viene esta reflexión al caso porque en las últimas semanas, en algunos de los foros, comités, grupos de trabajo y otros concilios en los que estamos inmersos se han planteado los requisitos que un profesional debe cumplir para ser, por ejemplo, BIM Manager.
Solo tenemos que buscar una sola vez en google el perseguido término para que los anuncios de masters (no oficiales, por supuesto), cursos, masterclass, exposiciones, congresos, reuniones, seminarios, etc. nos bombardeen, pero ¿Qué es ser BIM Manager? ¿Qué hace? ¿Puede cualquiera recibiendo la formación adecuada ser BIM Manager?
Vuelvo a la premisa inicial y permitidme que me autocite:
“…los requisitos que un profesional debe tener para ser, por ejemplo, BIM Manager”.
Ya en esa frase se dice que lo primero e imprescindible es que la persona sea un profesional. Algo que a mi modo de ver empieza con una titulación en la mayoría de los casos, pero que no puede ni debe quedarse en ello. Es preciso, es imprescindible el conocimiento de la profesión y no solo ostentar un título. Haberla ejercido. Haber pisado una obra. Sufrir –y gozar- con los avatares de un proyecto desde el comienzo. Verlo crecer y modificarse a cada paso y verlo materializarse. Saber hacerlo realidad.
Por desgracia nos encontramos en nuestra época y me temo que va a extenderse a toda velocidad, con un profesional titulado, que se manifiesta ejerciente pero que apenas ha tenido la oportunidad de realizar algún pequeño encargo o realizado algún pequeño trabajo en una empresa de manera puntual y testimonial. Y no por culpa suya precisamente.
Desgraciadamente y aunque no sea culpa suya, la acumulación de títulos formativos, el conocimiento de las herramientas BIM u otras no le van a convertir en un profesional, mucho menos en un buen profesional.
No me confundáis. No soy escéptico con el BIM como ya sabéis los que me tratáis. Bien al contrario, soy un exaltado de la nueva metodología, casi un telepredicador del BIM, un buhonero itinerante en la difusión de la recién llegada religión. Arrojad ese CAD al abismo y dejaos llevar, pecadores de la polilínea, infieles del espacio-papel, abandonad esos falsos ídolos vestidos de capas (no españolas, que me encantan, sino las otras) y entregaos a ese hipnótico y adictivo modelado BIM.
Sin embargo no conseguiréis (solo) con ello ser unos buenos profesionales, siento decíroslo. Nunca os superaran modelando un muro, sus materiales, sus capas…hasta que lleguéis a unirlo a otro elemento. En ese momento, revitiano convencido, te llenas de dudas. Es aquí cuando tú, allplanero de mis entretelas abres los ojos hasta el paroxismo. No has visto un encuentro de un muro con una cubierta en la vida real. Desconoces el orden, la prioridad, el momento correcto de ejecución de distintas unidades de obra. Y no es culpa tuya. Todos hemos pasado por ahí.
Pero es que hay algunas premisas fundamentales en BIM que no me canso de repetir. Se modela como se construye es la primera de todas ellas. Si no sabemos construir no sabremos modelar. Pensar en la presupuestación y en los datos que voy a extraer del modelo al modelar. Si no he presupuesto nunca un proyecto no sabré modelarlo adecuadamente.
Necesitamos profesionales, estoy convencido. Y BIM hará mejores profesionales, lo sé y yo espero colaborar a formar algunos. Pero es necesario que comprendáis, futuros proyectistas, directores de obra, directores de ejecución que ser un ejemplo de vuestra labor no es ser un dominador de una herramienta de construcción virtual. Porque solo puede construir virtualmente aquel que sabe construir realmente. Es así.
Espero que pasen los años y todos hayáis tenido la oportunidad de hacerlo. De llegar a modelar aquello que ya sepáis perfectamente construir. Ese será el momento en el que BIM podrá, sin lugar a dudas, dar un plus a nuestra profesión. No solo a un currículum.
Como muy bien dice usted en el artículo, no sabremos modelar sin saber construir. Yo estuve en obra 2 años y por falta de proyectos muchos tuvimos que ir fuera ahora vuelvo a la carga pero como muy bien dice aun estoy muy verde en el tema constructivo y por eso quería preguntarle, aparte de formarme en la obra como tal, me gustaría saber si hay algún curso, revista, etc., que pueda enseñarme los procesos constructivos reales en obra, tiempos de ejecución, etc., para ayudarme en dicha formación.
Espero que me pueda ayudar de alguna manera.
Muchas Gracias por su atención. Un cordial saludo.
Eudald Bonet Manchado
Hola Eudald, me temo mucho que la única manera es la experiencia en obra además de una formación previa, las carreras universitarias dirigidas hacia la edificación son el camino más especializado, pero me temo que se precisa un cierto recorrido profesional real para llegar a dominarlo.
Un saludo
Hola,
Estando en esencia de acuerdo con el articulo, si me lo permite, quisiera hacer una reflexión, y como decia Gustavo Bueno, se piensa en contra de algo/alguien, en mi caso en contra de los arquitectos superiores, a los que esto del BIM jubilará anticipadamente a más de uno…
Creo que según están las universidades hoy, sobre todo las de arquitectos- superiores (artistas efímeros hijos de la postmodernidad, según mi denominación), el BIM no va a resolver EL problemas de los proyecto que llegan a obra, y que se ha vuelto sistémico en este gremio, pese a que son titulados superiores y puede parecer , según el articulo que serian los únicos que pueden sacar partido al BIM, creo que para nada.
EL problema sistémico al que hacia referencia antes, no es otro que el de la ausencia enorme de detalles constructivos en los proyectos, y el Revit o programa que usen, no lo va a resolver «per se», cuando en sus mentes de arquitectos lo único que creen que deben ofrecer es un bonito y bien rematado muro cortina de cristal. Solo eso. A veces pienso que la existencia de esta opción de muro dentro de la herramienta solo existe para el gremio en cuestión (fuera de la broma, el muro cortina me parece muy útil, más allá de esta crítica)
En resumen, en mi opinión a los arquitectos les podemos dar por perdidos, sus majestades salen así de las universidades de serie. Y las honrosas excepciones, que son admirables que creen en el BIM, son, en la mayoría de los casos, repudiados por su propio gremio.
Si dividimos los links de un modelo BIM de tamaño mediano (200 Mb o más), típico de una oficina técnica cualquiera, junto con los roles de cada parte del modelo, podríamos ver, según mi experiencia esto:
– Link de Estructura: Ingeniero de estructuras – Usará BIM
– Link de Edificación : Arquitecto – Delegará el BIM en su delineante BIM
– Link de Instalaciones: Ingeniero Industrial- Usará BIM
El modelo de edificación , no veo que lo vayan a trabajar los arquitectos, sino que estos van a seguir tirando, si se lo pueden permitir, de delineantes en este caso de BIM.
Creo que la metodología BIM va a sacar del mercado a todo el mundo que no tenga nada que decir a través de un proyecto, tenga o no, una titulación superior (de estas universidades mediocres de ahora) Así que animo a todos a que empiecen a estudiar en BIM , porque va a haber sitio para muchos
Estamos de acuerdo en que habrá sitio para todo aquel que quiera adoptar los nuevos métodos, independientemente de su formación. Será una cuestión de actitudes y no solo de aptitudes.
Saludos!