En metodología BIM, para crear modelos útiles y ligeros, estamos buscando en todo momento el equilibrio entre la simplificación en la introducción de datos y la complejidad real de información de los proyectos, lo cual obliga a incorporar varias claves para cuestiones (parámetros) de distinta naturaleza, como por ejemplo acabados o cumplimiento de ocupación y evacuación.
Por ejemplo, cuanto más se centraliza la información en una sola tabla de claves de planificación, más rápido se meten dichos datos en habitaciones, y menos posibilidades de errores vamos a tener, pero probablemente creemos una tabla de calves demasiado grande, para poder recoger toda la casuística de acabados, accesibilidad, evacuación o cualquiera otros aspectos (parámetros) que afecten a habitaciones.
Lo que sí es claro, para un flujo de trabajo ISO 19650, en el caso de que coexistan funciones (roles) diferentes en la elaboración del proyecto, es que por responsabilidad sobre la información que cada agente incorpora al modelo, cada función/agente debe tener su tabla de claves de planificación independiente.
No es posible la simplificación de tipologías de habitación en una sola tabla clave de planificación, con parámetros en dicha tabla que competen a diferentes funciones o agentes. El agente que incorpora la información de recorridos de evacuación u ocupaciones debe tener una tabla y el agente que está pensando en los acabados debe tener su tabla clave de acabados, de forma independiente.
Aunque siempre se puede intentar simplificar estas tablas si el proyecto te lo permite… como siempre habrá que adaptar el BEP a las necesidades del proyecto.